Como siempre cada cuatro años, y desde hace décadas, será una de las más reclamadas en las tiendas. Una carta de un juego. Por eso ahora no es el momento de tirar la toalla o abandonar la lucha, ya que el destino está a punto de darte premio tan grande como merecido. Ootro caso, el jefe de un amigo, me cuenta que un día se lo encuentran en un bar, un tipo grande ya, con peluca y vestido, y le dice, ayyyy no lo puedo ocultar más, soy mujer.